La Agencia Estatal de Meteorología para el Tiempo y el Clima de España (AEMET) informó de que en enero llegaría a la península la primera ola de frío del año.
Las temperaturas bajaron bruscamente en toda España debido a la llegada de dos masas de aire marítimas polares procedentes del interior de Europa, que combinan aire ártico marítimo y continental.
Las borrascas Gerard y Fien, dejan un paisaje de auténtico invierno que parecía que nunca iba a llegar o que, al menos, esperábamos haber vivido en diciembre de 2022. Estos dos fenómenos climáticos provocan un temporal de nieve, frío, viento y oleaje, que afecta a diferentes zonas de España, sobre todo a la mitad norte.
De hecho, a lo largo de la segunda semana de enero tienen lugar nevadas con cotas bajas o medianas en toda España y se espera un nuevo episodio de frío con temperaturas que rondan los 5ºC tan solo unos días después. De hecho, ciudades como Lleida o Madrid alcanzan cifras por debajo de los 0ºC a lo largo del mismo periodo.
Para combatir el frío, muchas familias y hogares deciden hacer lo que llevaban meses postergando: encender sus sistemas de calefacción y, con ello, incrementar su gasto en la factura de la luz o el gas.
Sin embargo, el aumento del coste mensual de la factura no es el único problema para los españoles, al menos, para aquellos que están concienciados con la protección del Planeta y la lucha contra el cambio climático.
Y es que alrededor del 50% del parque de viviendas del país dispone de una calificación energética baja. Y debemos tener en cuenta que, cuanto menor es la eficiencia energética de una vivienda, mayor será el gasto en los combustibles fósiles que hacen funcionar la calefacción.
Más de la mitad de edificios de España son anteriores a 1980 y disponen de una baja eficiencia energética
Más de la mitad de los edificios de España son anteriores al 1980, año en el que por primera vez entró en vigor una normativa que obligaba a los constructores a cumplir unos mínimos de eficiencia energética.
Por eso, la mayoría de viviendas que no han sido rehabilitadas disponen de un aislamiento pobre o precario y un sistema de calefacción antiguo, es decir, que requiere de grandes dosis de energía para climatizar la totalidad del hogar.
Los expertos aseguran que, durante los periodos de frío extremo, la huella de carbono de los españoles sube de forma drástica. Esto hace que la ciudadanía se replantee si el sistema que utiliza para climatizar su casa o piso es el más adecuado para el Planeta y, por supuesto, para su bolsillo.
El incremento en el cómputo de emisiones mensual, también hace que se pregunten cuál es exactamente la forma más sostenible de combatir el frío y si esta les permitirá, a la larga, obtener un ahorro energético.
Cuáles son los sistemas de calefacción sostenible
Hoy en día existen un gran número de soluciones y sistemas de calefacción sostenibles o ecológicos. Algunos de ellos generan un número mínimo de emisiones y otros son directamente ZEO -cero emisiones-.
Sin embargo, no todos son aptos para cualquier tipo de vivienda y, dependiendo de las condiciones de la misma, será más rentable, eficiente y sostenible apostar por uno u otro.
Debemos tener en cuenta que muchos de los sistemas convencionales de calefacción han quedado obsoletos con respecto a los nuevos objetivos y demandas a favor del clima. El 85% de las calderas de las casas son ineficientes. El paso más importante y necesario es eliminar definitivamente los sistemas de calefacción con calderas de carbón y gasoil de los hogares.
Después de tomar esta medida, instalar una nueva caldera o sistemas de climatización con biocombustibles, pueden ser opciones útiles para reducir la huella de carbono de los hogares y ser lo más ZEO posibles.
- Calderas murales de condensación
- Calefacción Solar
- Calefactores eléctricos
- Estufas de Pellets
Nuestra ingeniera industrial y experta en cambio climático Laura Jarauta, explica con detalle las características de estos cuatro sistemas de calefacción sostenible en un artículo de la Plataforma ZEO.
Además, una de las claves para reducir el consumo de calefacción y, con ello, el de la factura de la luz es sacarle el máximo rendimiento al consumo mediante la domótica.
En este sentido, poder controlar la calefacción desde tu dispositivo móvil estés donde estés puede mejorar la eficiencia energética del sistema de climatización.
Optimizar el encendido del sistema de calefacción nos permitirá tener el máximo confort sin derrochar energía. Al final la energía más ZEO es aquella que no se consume.
En Plataforma ZEO no hemos querido indicar cuál es la mejor forma de combatir el frío de forma sostenible, porque dependiendo de las circunstancias, podría ser mejor un sistema u otro.
Lo que está claro es que para poder reducir las emisiones a nivel global y cumplir con los objetivos de descarbonización propuestos por la ONU, debemos apostar por sistemas de climatización más sostenibles o ecológicos.
PlataformaZEO cuenta con la colaboración de periodistas y expertos ambientales que trabajan cada día para ayudaros a estar más informados del cambio climático y el calentamiento global
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