En los últimos días se ha viralizado el vídeo de un oso hambriento en la isla de Somerset, en el noreste de Canadá. Los fotógrafos que hicieron el reportaje se quedaron conmocionados al presenciar la escena y decidieron grabar todo. Uno de ellos, Paul Nicklen, afirmaba al compartir el vídeo:

«Así es como se ve morir un animal de hambre».

Nicklen, su grupo SeaLegacy y National Geographic lo publicaron todo el día 8 de diciembre. Después de esta divulgación casi todos los medios de comunicación, tanto estatales como extranjeros, se hicieron eco del caso. El The New York Times lo titulaba así: «El vídeo de un oso polar hambriento que ‘te hace añicos el corazón’».

Tal y como afirma La Vanguardia: «El vídeo se ha hecho muy popular, ya acumula más de un millón y medio de visitas y se ha convertido en un icono renovado del calentamiento del planeta»

Por un lado, hay personas que sí relacionan esta atroz fotografía con el cambio climático. Su razonamiento tiene que ver con la alimentación de estos animales. Debemos recordar que los osos polares se alimentan de focas las cuales salen por los respiraderos de las placas de hielos marinos. Por lo tanto, si a causa del calentamiento global, las placas se deshielan, tendrán muchas más dificultades para encontrar su alimento. Evidentemente los osos querrán buscar la comida y, por tanto, tendrán que caminar kilómetros para encontrarlo. Entre los defensores de esta teoría encontramos el propio fotógrafo. Nicklen es muy contundente, él cree que si la Tierra continúa calentándose, se perderán osos y otras especies.

La previsión es que en 2050 esta especie se reduzca más de un 30%. Entre los problemas que le afectan encontramos: la contaminación, los cazadores furtivos y el calentamiento global

Otros expertos no están tan seguros de que la causa directa de la muerte sea el cambio climático. Por ejemplo, un profesor de la Universidad de Alberta (Canadá) explica que no se puede afirmar rotundamente esto, ya que no se ha llevado a cabo ninguna autopsia. Aunque puede que no haya sido la causa directa en este caso, afirma que el calentamiento de la Tierra sí puede llegar a producir estos sucesos. Una respuesta similar fue la de Luis Suárez, responsable de especies de WWF: «La única manera de saber si murió de desnutrición sería hacer una necropsia o analítica. Pero sabemos que el cambio climático sí está dificultando a los osos la obtención de alimentos y está acelerando este tipo de problemas ».

Voces contrarias

Aunque la idea no es descabellada, debido al deshielo, muchas especies dejarán de alimentarse adecuadamente y podrían morir, muchos piensan que este caso concreto del oso hambriento no tiene nada que ver con el cambio climático ¿Por qué? Por ejemplo, un biólogo experto en el Ártico, Jeff Higdon; dice que el oso podría haber muerto de un cáncer y que no hay pruebas concluyentes que demuestren lo contrario. Incluso, hay personas que no les ha sorprendido nada estas imágenes y vídeos, es el caso del experto en osos polares en la región de Nunavut. Leo Ikakhik asegura que no es insólito que un oso aparezca en estas condiciones, además, dice que normalmente pasan cosas así y que sería consecuencia de una herida o lesión del oso.

Incluso, han llegado críticas de falseamiento, éstas llegan desde algunos medios de comunicación canadienses. Un ejemplo ha sido el titular del diario National Post «estas imágenes no son de un documentalista imparcial o de espectadores preocupados. Son parte de un muy calculado trabajo de relaciones públicas».

La solución pasa por incentivar las energías renovables y disminuir las emisiones contaminantes. Muchas ciudades están luchando fervientemente para parar el problema. El Acuerdo de París sólo fue el inicio, hay un empuje final por parte del colectivo político y, sobre todo, la concienciación ciudadana. Aunque esta fotografía ya se ha convertido en un icono en contra del cambio climático y el calentamiento global.