Durante la COP27, el secretario general de la ONU, Antonio Gutérres alertó de que “nos acercamos al infierno climático, aún con el pie en el acelerador”.

Y es que, pese a que en los últimos años la sociedad y la comunidad internacional se han puesto manos a la obra para frenar el cambio climático, aún queda un largo camino por recorrer para lograr una sociedad ZEO -cero emisiones-, y prevenir las consecuencias del cambio climático.

Hace ya casi medio siglo, la mayoría de países se pusieron de acuerdo sobre la veracidad del cambio climático y, en un intento por evitar sus consecuencias, se comprometieron a seguir unos objetivos comunes para reducir emisiones.

Las Naciones Unidas ha sido el principal organismo que ha estado luchando contra el cambio climático. A lo largo de este tiempo, ha logrado importantes hitos como los Acuerdos de Montreal, el Protocolo de Kyoto o el Acuerdo de París. Sin embargo, los próximos años serán decisivos para evitar un punto de no retorno con respecto al calentamiento global.

En paralelo, deberemos hacer frente a retos como la crisis económica provocada por la pandemia o la tendencia de algunos países a priorizar sus intereses nacionales a la supervivencia global y la lucha climática.

La lucha constante de la ONU para reducir el calentamiento global

El primer avance fue el Protocolo de Kyoto (1997), el primer compromiso internacional creado para reducir las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) que causan el calentamiento global. En 2001 el documento había sido ratificado por más de 180 países.

Este fue un importante progreso para impulsar la conciencia climática a nivel político, pero que no logró los resultados esperados. Pese a los esfuerzos por parte de los países, los objetivos de reducción de emisiones y los mecanismos para combatirlo no fueron suficientemente ambiciosos.

Y es que, durante la primera década del siglo XXI, especialmente en China, las emisiones GEI se dispararon. Para 2009 el calentamiento global del planeta ya era de 0,8ºC, con respecto a los niveles industriales.

Años después se firmó el Acuerdo de París (2015), que actualmente se ha convertido en la hoja de ruta que define los esfuerzos y objetivos climáticos.

Este documento compromete a los países firmantes a mantener por debajo de 1,5ºC el calentamiento global de la Tierra (máximo 2ºC), con respecto a los niveles industriales, para así evitar una situación de no retorno y consecuencias perjudiciales para la salud del Planeta y los seres vivos que lo habitan.

El Acuerdo de París es el compromiso global por el que se rige la comunidad internacional, los gobiernos, la sociedad civil y las empresas para proteger el Planeta, y bajo el cual articulan sus principales planes de acción para frenar el cambio climático.

Este documento pone el foco en reducir el calentamiento global de la Tierra. Ahora bien, ¿qué sabemos exactamente sobre el origen de este fenómeno y sus consecuencias? ¿Qué creencias existen alrededor del mismo y por qué tiene lugar?

A través de este completo artículo responderemos a las preguntas que permitirán conocer con detalle por qué la clave para evitar el cambio climático es reducir el calentamiento global de la Tierra.

¿Quién descubrió el calentamiento global de la Tierra?

Pese a que los planes, objetivos y mecanismos para frenar el cambio climático se activaron hace menos de una década, la causa raíz de este problema, es decir, el calentamiento global de la Tierra, fue descubierto hace más de un siglo.

En 1860 el físico John Tyndall empezó a investigar el efecto invernadero a partir de unos estudios e investigaciones previas llevadas a cabo por Eunice Foote. A partir de estos documentos, Tyndall descubrió que las moléculas de gases como el dióxido de carbono, el metano y el vapor del agua eran capaces de bloquear la radiación infrarroja, algo que no sucede con el oxígeno y el nitrógeno.

Entonces Tyndall llegó a la conclusión de que, cuando la radiación del Sol llega a la Tierra, parte de la misma es absorbida por la superficie terrestre y se convierte en calor. Mientras que la otra es absorbida por los gases que se encuentran en la atmosfera (Gases de Efecto Invernadero), que la reemiten en todas direcciones, incluso de vuelta a la propia Tierra.

Es decir, el científico irlandés fue el descubridor del mecanismo natural de absorción de los Gases de Efecto Invernadero (GEI) que tiene lugar en la atmosfera, un proceso que actualmente conocemos como efecto invernadero.

Pero su investigación fue más allá. Este hallazgo le permitió descubrir también que los cambios o variaciones en la composición atmosférica, tanto en los niveles como en los tipos de Gases presentes en la atmosfera, podrían provocar variaciones en el clima.

En 1896 el científico sueco Svante Arrhenius fue el primero en apuntar que estas variaciones climáticas podrían dar pie a un incremento de la temperatura media del Planeta.

En un artículo Arrhenius predijo por primera vez que los cambios en los niveles de dióxido de carbono atmosférico podrían alterar sustancialmente la temperatura de la superficie a través del efecto invernadero. Años después, a este fenómeno se le denominó: calentamiento global de la Tierra.

¿Por qué se produce el calentamiento global de la Tierra?

Antes de la era industrial, la sociedad empezó a urbanizar y poblar de forma masiva la Tierra: taló árboles y asfaltó calles, construyó edificios cada vez más altos y agrupaciones de casas cada vez más extensas, y edificó nuevas ciudades, pueblos y urbanizaciones.

Durante todo el proceso, empezó a consumir los recursos naturales de forma desmedida y sin control. Sin embargo, no fue hasta la época de la industrialización, cuando verdaderamente comenzó a dañar el Planeta.

En la década de los 80, el elevado coste de la mano de obran en relación al coste de la energía y del capital, incentivó la adopción de nuevas tecnologías que permitían ahorrar trabajo y, por lo tanto, hacían rentable la inversión en innovación.

La humanidad empezó a quemar combustibles fósiles para obtener energía y para desplazarse de un lugar a otro: se empezaron a liberar a la atmosfera gases de efecto invernadero. Cabe decir que estos gases siempre han estado presentes en el Planeta de forma natural y en un equilibrio perfecto que hace posible la vida en la Tierra.

Sin embargo, con la industrialización se incrementaron los niveles de algunos de estos gases, especialmente del dióxido de carbono, y años más tarde, del metano -debido a la expansión de la ganadería intensiva, la mala gestión de los residuos, etc-. Todo esto dio pie a un exceso de gases GEI en la atmosfera y a un incremento de la temperatura global del planeta, conocido como calentamiento global.

El IPCC alerta de que, a escala global, en los últimos 100 años la temperatura ha incrementado 0,76ºC

Según el IPCC (Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático), en los últimos 100 años, la temperatura media global ha aumentado 0,76 ºC (Grados Celsius). En la actualidad, 11 de los 12 años más calurosos desde 1850 se concentran entre 1995 y 2006. Además, en España el calentamiento global ha sido de 1,5 ºC, mientras que, en el Ártico, la cifra asciende hasta los 5 ºC.

Pese a estas preocupantes cifras y los esfuerzos para activar la transición energética y lograr una sociedad ZEO -cero emisiones-, en 2022 las emisiones GEI se incrementaron un 5,7% con respecto al año anterior. Sin embargo, esta cifra supone un 5,17% respecto al 1990 y un 31% menos respecto a 2005.

En 2022 el transporte por carretera aumentó sus emisiones un 3,3%, mientras que el sector energético las incremetó un 24%. Los expertos apuntan a que este último aumento tiene que ver con el cierre del suministro de gas por parte de Rusia, que obligó a muchos países a volver a la dependencia energética del carbón u otros combustibles fósiles.

¿Cuál es la relación entre cambio climático y calentamiento global?

Cuanta más concentración de Gases de Efecto Invernadero hay en la atmosfera, más se retiene el calor y más se eleva la temperatura de la Tierra.

Estos gases extra, generados por el ser humano, incrementan el efecto invernadero actual y provocan el calentamiento global de la Tierra que da lugar a un cambio global en el clima: el cambio climático.

En este sentido, cuando hablamos de calentamiento global, nos referimos al proceso que tiene lugar debido a la emisión desmedida de gases GEI. Mientras que, cuando hablamos de cambio climático, hacemos referencia al resultado final o consecuencias de este proceso.

La relación entre estos dos términos es clara y está avalada por la amplia mayoría de la comunidad científica. El 99,9% de los estudios científicos confirman que el cambio climático es real y está causado por el calentamiento global de la Tierra. Además, aseguran que el origen de este fenómeno es antropogénico, es decir, que está provocado por las emisiones GEI liberadas a la atmosfera por el ser humano.

¿Cuáles son las consecuencias del calentamiento global?

Las consecuencias del calentamiento global son muchas y ya están afectando a nuestra sociedad. El cambio climático ha dejado de ser un problema del futuro. Tal y como alertó Greta Thunberg durante su discurso en la COP26 “nos encontramos en la sexta extinción masiva de las especies”.

Conocer cuáles son las principales consecuencias causadas por el calentamiento global de la Tierra y la emisión desmedida de Gases de Efecto Invernadero nos permitirá activar mecanismos para detener y adaptarnos a este problema.

1. Fenómenos climáticos extremos

El IPCC asegura que el cambio climático es responsable del incremento de fenómenos climáticos extremos que ha tenido lugar durante la última década.

Desde la borrasca filomena, hasta las lluvias torrenciales de Alemania o Pakistán. El calentamiento global ha dado pie a que los fenómenos climáticos extremos sean más frecuentes, prolongados e intensos que antaño.

Todo ello se debe a que el aumento de la temperatura del Planeta se está acercado de forma muy peligrosa a los 1,5 grados que el Acuerdo de París establecía como límite. No debemos olvidar que el año 2022 fue el quinto o sexto año más cálido desde que se tiene registro.

Las olas de calor y de frío, los ciclones tropicales o huracanes, los periodos de sequía o las lluvias torrenciales son algunos de los fenómenos climáticos extremos que han tenido lugar de forma más frecuente en los últimos años.

En el caso de los huracanes, por ejemplo, el incremento de la temperatura ha provocado que estos sean más violentos. Este fenómeno atmosférico es la forma que tiene el Planeta de repartir el exceso de calor de las zonas cálidas a las más frías. Es por eso que, cuanto más sube la temperatura, más huracanes tendrán lugar y más ciudades, cultivos e infraestructuras quedarán completamente destruidas.

2. Empeoramiento de la Salud y propagación de enfermedades

El cambio climático podría afectar a la vida de millones de personas. De hecho, los fenómenos climáticos extremos comentados anteriormente, afectan seriamente a la seguridad alimentaria, sanitaria, energética e hídrica de las regiones donde tienen lugar.

Además, obligan a las personas que lo han perdido todo, a migrar a poblaciones vecinas o lugares completamente desconocidos para ellos, lo que puede afectar gravemente a su salud mental en caso de que el proceso de adaptación no sea efectivo.

En ocasiones, las personas se ven obligadas a cambiar su forma de vida y de subsistencia para adaptarse a los cambios que han provocado el cambio climático y estos fenómenos meteorológicos extremos.

 

Un ejemplo de ello fue la crisis que tuvo lugar en 2012 en los países del Sahel, en el norte de África. Este territorio sufrió una crisis alimentaria que afectó a unos 18 millones de personas debido a la escasez de lluvias.

En 2019 una nueva sequía en el Cuerno de África puso en riesgo de muerte debido al hambre extrema a 7,6 millones de personas.

Es más, el cambio climático también podría contribuir a la proliferación y propagación de enfermedades. Y es que los cambios de temperatura extremos pueden hacer que algunas zonas templadas sean más acogedoras para la propagación de determinadas enfermedades.

Varios estudios científicos aseguran que el actual sistema de consumo actual, además de provocar el cambio climático, también influyó en la propagación y el desarrollo del virus SARS-COVID.

Según un artículo publicado en la National Library of Medicine de Estados Unidos, “el progresivo deterioro de los ecosistemas debido al modelo de producción de alimentos e insumos tomado de la naturaleza dio origen a esta pandemia que estamos sufriendo provocada por el coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave (SARS-CoV-2) y también las últimas pandemias en el mundo”.

“Hemos degradado extensas poblaciones forestales y selváticas para cultivar alimentos y criar ganado. Aquello que consumimos tiene un impacto en la naturaleza. La deforestación, el desarrollo agrícola y el cambio climático están causando incremento en enfermedades transmitidas por vectores. La pandemia de COVID-19 es el resultado de la perturbación ocasionada por la actividad humana sobre la naturaleza” alerta el informe.

3. Inundaciones y desaparición de ecosistemas

Debido al calentamiento global, la temperatura de los océanos ha subido. Esto ha dado pie al deshielo de los casquetes polares y, por consiguiente, al aumento del nivel del mar.

Este suceso está afectando gravemente a los países insulares, cuya línea de playa ha empezado a subir y a “engullir” las casas, tiendas y edificios de las ciudades, pueblos y barrios costeros, pero también a algunas de las principales ciudades del mundo como Los Ángeles, Nueva York, Ámsterdam o Venecia, que fueron edificadas en línea o por debajo del nivel del mar.

En paralelo, el calentamiento global ha provocado que haya menos lluvia y más inundaciones. En este sentido, el clima se adapta a estas nuevas condiciones dando pie a cambios en la duración de estaciones o activando patrones propios de climas más monzónicos.

Todo ello afecta gravemente a los ecosistemas llegando incluso a provocar su completa desaparición. Un ejemplo de ello es la desaparición del mar de Aral, ubicado en Kazajistán. Este ecosistema fue considerado antiguamente uno de los mayores lagos del mundo, con una extensión 68.000 km2. Sin embargo, en la actualidad únicamente se puede observar menos del 10%.

En la última década, algunas regiones de montaña han perdido alrededor de la mitad de su cota de nieve. En paralelo, algunos espacios naturales protegidos están en grave peligro de desaparecer. De hecho, según la Unesco, los glaciares podrían desaparecer en menos de 30 años. El patrimonio glaciar mundial pierde una media de 58.000 toneladas de hielo al año, el equivalente al volumen de agua utilizado por España y Francia.

4. Desaparición de especies animales


Debido a los cambios en el clima, un gran número de especies de animales están viendo cómo su clima actual desaparece y les es imposible adaptarse a estos cambios tan rápidamente. Estos son algunos de los ejemplos que ponen en peligro la biodiversidad del Planeta:

  • Los osos polares mueren ahogados porque el número de hielos flotantes se ha reducido considerablemente.
  • Las aves migratorias han perdido su capacidad de emigrar porque les es imposible seguir los flujos de temperatura habituales.
  • La gran barrera de coral australiana está desapareciendo debido al incremento de la temperatura del océano.
  • El número de polinizadores se ve mermado día a día y con ello, se pone en riesgo el proceso de polinización de las flores y plantas.

Toda esta información sobre el calentamiento global de la Tierra nos lleva a preguntarnos: ¿cómo podemos reducir la temperatura del Planeta?

Para lograr reducir el nivel de Gases de Efecto Invernadero de la atmosfera es imprescindible reducir las emisiones y aspirar a una sociedad ZEO -cero emisiones-. De lo contrario, corremos el riesgo de que, una vez logremos detener el calentamiento global de la Tierra, volvamos a consumir y emitir del mismo modo y, a la larga, volvamos a encontrarnos en la misma situación.

¿Te ha parecido este, un artículo 5 estrellas? Déjanos tu valoración:

1 Star2 Stars3 Stars4 Stars5 Stars (No Ratings Yet)
Cargando…
HAZTE ZEO
close slider

únete a la comunidad ZEO

Mantente al día de las últimas acciones, eventos y noticias ZEO

Información Básica Sobre Protección de Datos:
Responsable: SPONSORING MARACANA SL
Finalidad: Atender sus consultas y/o solicitudes. Acciones comerciales
Derechos: Acceder, rectificar y suprimir los datos, así como otros derechos, como se explica en la información adicional.
Información adicional: Puede consultar la información adicional y detallada sobre Protección de
Datos en nuestra página web, apartado Política de Privacidad

Acepto las condiciones legales y la Política de privacidad