Planes para un invierno más sostenible

Nos encontramos en un contexto histórico marcado por la urgente necesidad de reducir emisiones para frenar el cambio climático. Desde 1990, con el comienzo de la industrialización, la humanidad ha generado emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI), sin tener en cuenta las consecuencias que estas podrían tener para el Planeta y los ecosistemas.

En poco más de tres décadas, hemos provocado un creciente calentamiento global de la Tierra con el que ahora debemos lidiar para evitar una serie de fenómenos climáticos y consecuencias extremas.

En escenarios como la Conferencia Internacional sobre cambio climático (COP27), celebrada en Egipto las dos primeras semanas de noviembre de 2022, los países han debatido cómo endurecer sus compromisos de reducción de emisiones. Asimismo, revisan sus Planes Nacionales de Energía y Clima y los hitos y objetivos conseguidos hasta la fecha. Y, por último, reflexionan sobre cómo pueden articular una transición ecológica más justa para todos y cuánto les va a costar.

Sin embargo, todas estas decisiones y cuestiones de debate pueden parecer muy lejanas o ajenas para la ciudadanía de a pie. Por otro lado, los gobiernos locales y regionales, las grandes organizaciones y corporaciones o el tejido empresarial deben rendir cuentas a directrices y documentos legales, como, por ejemplo, la Ley Española de Cambio Climático. También suelen estar sujetos a Planes de Acción Internacionales, como el Fit for 55 o el Acuerdo de París (2015).

Ahora bien, ¿qué hay de la ciudadanía? ¿Existen documentos legales o vinculantes que les obliguen a tomar medidas para reducir la huella de carbono? Por el momento no.

Sin embargo, existe algo que les lleva a querer reducir su impacto medioambiental en el mundo, especialmente, en épocas del año en las que las emisiones se disparan debido al incremento de las compras, los viajes y el consumo energético.

La conciencia ZEO es la voluntad independiente de las personas de reducir emisiones

A esta voluntad de reducir emisiones y contribuir de forma voluntaria a los objetivos de la industria y la política internacional se le llama conciencia ZEO. Tener el objetivo “Zero Emissions” en mente les mueve a cambiar aspectos de su vida cotidiana y a promover una nueva actitud entre los familiares, amigos y otros colectivos.

También a apostar por planes de ocio o entretenimiento con un menor impacto ambiental o bajos en emisiones. En este sentido, ahora que se acerca el invierno, como hemos dicho anteriormente, una época sensible de cara a la lucha climática debido al incremento global del consumo, desde la Plataforma ZEO hemos recopilado una serie de planes que te permitirán disfrutar de esta época del año de forma sostenible.

Esquí sostenible

Las actividades estrella en invierno acostumbran a estar relacionadas con la nieve. La temporada de esquí arranca a finales de noviembre y diciembre y se prolonga hasta mediados de abril.

Según los datos de la SETRADE (Sociedad Española de Traumatología del Deporte), el esquí es un deporte practicado por más de 200 millones de personas en todo el mundo. Esta es, sin duda, una gran suma de personas que, para poder disfrutar de esta práctica, cada año se desplazan a estaciones de esquí de todo el mundo, generando un cómputo extra de emisiones para el Planeta.

¿Pero es que acaso es posible esquiar de forma sostenible? La respuesta es sí. A través del documental The Melting Point, los esquiadores Alice Linari y Lorenzo Alesi explican cómo reducir la huella de carbono de los viajes de esquí.

De hecho, ambos recogen una serie de pautas o consejos que permiten reducir al máximo las emisiones derivadas de esta práctica deportiva cada vez más aceptada entre la sociedad:

• Esquía en modo travesía, en vez de utilizar los famosos remontes que vemos en las estaciones de esquí. Más cansado, sí, pero más responsable con el medio ambiente.

• Esquía en estaciones sostenibles. Actualmente, podemos encontrar algunas de estas estaciones en los principales destinos para esquiadores:
  • Gstaad, Suiza
  • Arosa Lenzerheide, Suiza
  • Flimsz Laax Falera, Suiza
  • San Martino di Castrozza, Italia
  • Carezza, Italia

• Si es posible, explora montañas cercanas para poder esquiar de una forma más natural y reducir la huella ecológica. Las estaciones de esquí convencionales generan un gran número de emisiones para su funcionamiento.

Sin embargo, si vives cerca de la costa o en un país en el que no tienes acceso a este tipo de clima, cuando te desplaces, recuerda compensar el CO2 de tus viajes en avión, en autobús u otro tipo de transporte alternativo.

• Utiliza un equipo de esquí fabricado con materiales reciclados y no químicos. Es importante recordar que las ceras de esquí y el snowboard, por ejemplo, pueden tardar más de 100.000 años en degradarse.

Sin embargo, algunas ceras de origen vegetal funcionan igual de bien y no tardan tantos años en desaparecer. De hecho, también es importante comprar ropa de esquí, especialmente las prendas impermeables, que estén hechas con tejidos ecológicos o reciclados. Recuerda buscar materiales que no contengan PCF, una fibra óptica basada en las propiedades de los cristales fotónicos.

Crea decoraciones recicladas

Uno de los momentos más divertidos y esperados de la Navidad es decorar la casa con todo tipo de guirnaldas, el árbol, el pesebre, etc. Ahora bien, para una persona que dispone de una auténtica conciencia ZEO, lo más importante es que todos los materiales utilizados para darle al hogar un ambiente más navideño sean circulares, ecológicos y sostenibles.

Un buen plan de sábado o domingo por la tarde para llevar a cabo con amigos o con familiares en casa puede ser realizar esta actividad. Cualquier momento es bueno para practicar la economía circular y, con un poco de ingenio y creatividad, convertir en un increíble adorno navideño cualquier residuo.

Además, este es un buen año para olvidar los árboles reales y, sobre todo, los de plástico, y apostar por opciones más sostenibles. Lo mejor es practicar el DIY y construir un árbol de Navidad con materiales de uso cotidiano o bien objetos reutilizados como palés, ramas secas, telas, etc. Además, también puedes utilizar residuos como envases, cartones o papeles.

En Internet encontrarás ideas que te servirán de inspiración y te ayudarán a hacer de tu árbol, la envidia de todas las visitas.

Compras navideñas sostenibles

Uno de los planes que más se acostumbran a hacer en invierno es el de comprar los regalos para nuestros familiares, amigos y más allegados. En este sentido, apostar por marcas sostenibles o bien comprar los regalos en comercios locales o de proximidad puede ser una opción ideal para reducir el impacto de tu actividad estas navidades.

En este sentido, la compra de ropa, accesorios y complementes es uno de los terrenos en los que puedes poner el foco. Teniendo en cuenta que la industria de la moda es la segunda más contaminante del mundo, por detrás del sector del petróleo, es importante que pongas el foco en apostar marcas de moda sostenibles y, a poder ser, nacionales.

De hecho, cada vez más diseñadores, tiendas y estilistas han decidido ponerse manos a la obra y trabajar con criterios de sostenibilidad y cuidado del medioambiente.

A continuación, desde la Plataforma ZEO compartimos una lista de las 11 marcas de moda sostenible españolas que están teniendo más buena acogida entre los consumidores.

La mayoría de ellas fabrican sus prendas en territorio nacional y apuestan por tejidos orgánicos y sostenibles:

1. Lifegist

2. Ecoalf

3. Alohas

4. Bohodot

5. The Playa & Co.

6. María Malo

7. Genuins

8. Efímero

9. My Faldas

10. CUS

11. Ecoology

Tarde de juegos de mesa

¿Quién puede superar esto? Zumos naturales, palomitas y juegos de mesa. El consumo y la huella de carbono de este tipo de plan es mínimo, mientras que la diversión está garantizada. Los juegos de mesa nos pueden llevar a pasar horas entretenidos.

Eso sí, para que este plan sea 100% sostenible, es importante que en el lugar en el que se va a llevar a cabo el encuentro el suministro energético y, a poder ser, la calefacción, sean de origen renovable o cero emisiones.

Por otro lado, el compromiso ZEO se duplica si estos juegos de mesa son de temática sostenible. En este sentido, aquí os dejamos 5 juegos de mesa que tratan el tema del medio ambiente, impulsan la lucha contra el cambio climático y promueven la educación ambiental.

• Steampark
• Fauna
• La cosecha
• Wild Environmental – Cambio Climático
• Güs
• Pandemic

Tal y como recoge este artículo, existen un gran número de planes y proyectos sostenibles por descubrir y disfrutar en invierno. Porque no es importante trabajar conjuntamente para reducir la huella de carbono de la sociedad durante los periodos festivos en los que se incrementa el consumo.