En noviembre de 2012, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, escribió en un tuit: “El concepto de calentamiento global fue creado por los chinos con el fin de hacer la fabricación de EEUU menos competitiva”.
En 2003, el presidente de Rusia Vladimir Putin incluso se aventuró a afirmar que el cambio climático era positivo para el planeta y en concreto, para su país. “Las temperaturas más cálidas permitirán a los rusos gastar menos en abrigos de piel, mientras que la producción de trigo aumentará, y por ello rendimos gracias a Dios” aseguró durante un evento político.
Teniendo en cuenta los actuales avances en materia de acción climática internacional y los recientes compromisos ZEO que han adoptado la mayoría de países, estas teorías nos parecen hoy muy alejadas de la realidad.
Los negacionistas creen que el calentamiento global se debe a los ciclos naturales climáticos del planeta
Pero lo cierto es que no es así. Hoy en día, aún existen colectivos que defienden estas conjeturas y niegan la emergencia climática. Para muchos, el calentamiento global ha sido causado por los ciclos naturales climáticos del planeta o bien por el aumento de la actividad solar durante el siglo XX.
El calentamiento global se puede explicar por los cambios en la actividad solar
Aunque es cierto que los ciclos solares – que duran aproximadamente unos diez años-, afectan a las temperaturas y al clima de la Tierra; si ese fuese el motivo del cambio climático, el calentamiento se observaría de forma homogénea en todas las capas de la atmósfera.
Actualmente, el incremento de la temperatura planetaria es mucho más evidente en las capas bajas en contacto con la corteza terrestre, mientras que es mínimo en la estratosfera, la parte más alejada de la Tierra. Este fenómeno demuestra la clara influencia de los gases GEI en el cambio climático.
Un 2,9% de la comunidad científica defiende que el cambio climático no tiene un origen antropogénico. El mayor problema reside en que algunas de las teorías negacionistas divulgadas por este pequeño grupo de científicos, son recogidas por políticos o personajes públicos con gran influencia y tomadas como válidas.
No existe consenso científico entorno al cambio climático y su origen antropogénico
Tanto es así que, pese a que el 97,1% de los estudios científicos publicados en las últimas dos décadas sobre el cambio climático apuntan a la humanidad como la principal culpable, estas personas influyentes alegan que “aún no hay consenso sobre el origen del cambio climático”. Este supone, el mayor argumento negacionista del siglo XXI.
La razón por la que acuñan estas teorías como válidas es que únicamente de esta forma, podrán seguir desarrollando actividades contaminantes en su propio beneficio. La mayoría de representantes del negacionismo son propietarios o están vinculados con empresas que dependen de los combustibles fósiles, y generan una elevada huella de carbono durante su actividad comercial.
Un manifiesto pide que llamen “negacionistas” a los científicos detractores de la teoría del cambio climático
En diciembre de 2014, cincuenta prestigiosos científicos y divulgadores miembros del Comité para la Investigación Escéptica, firmaron un manifiesto pidiendo que dejaran de llamar “escépticos” a todos aquellos que negaban la teoría del cambio climático y les empezaran a llamar “negacionistas”. Al parecer, “el escepticismo promueve la investigación científica y crítica, y el uso de la razón en el examen de afirmaciones controvertidas y extraordinarias. Está en la base del método científico. El negacionismo, por otro lado, es el rechazo a priori de las ideas sin consideración objetiva” se afirmaba a lo largo del manifiesto.
El científico Roy Spencer forma parte de este pequeño grupo de científicos “negacionistas” que tratan de minimizar el papel del ser humano en el calentamiento global. Este climatólogo americano elaboró en 2014 un interesante artículo que recoge los “TOP 10 argumentos escépticos” que niegan el cambio climático.
A través de 10 preguntas retóricas, Spencer cuestiona la llamada “patraña” del cambio climático extendida por los “nazis del calentamiento global” -así es como nombra a los defensores del origen antropogénico del cambio climático-.
Algunas de estas preguntas se recogen a continuación con el correspondiente argumento que la desmiente:
El cambio climático se frenó hace años
1. Roy Spencer: No hay calentamiento reciente. Si la ciencia del calentamiento global está tan “establecida”, ¿por qué el calentamiento global se detuvo hace 15 años, contrariamente a todas las predicciones de “consenso”?
Plataforma ZEO (PZ) responde: Simplemente, no lo ha hecho. En 2008, un informe publicado por el Hadley Center mostró que el planeta solo se había calentado unos 0,2 ºC de 1998 a 2008. Esta cifra tan baja fue interpretada por algunos científicos como el fin del cambio climático.
Sin embargo, la realidad es que en los datos publicados por la entidad se podía comprobar que los años más cálidos, con los que se llevó a cabo la comparativa, eran 1998, 2005, 2003, 2002, 2004, 2006 y 2007.
La falsedad de este razonamiento reside en que, en la actualidad, los años más calurosos vividos en el planeta ya no son esos. Desde 2008, las temperaturas planetarias han crecido de forma sustancial siendo 2017 el año más caliente de la historia y 2019, el segundo.
El calentamiento global es un fenómeno natural
2.Roy Spencer: ¿Natural o artificial? Si no sabemos qué parte del calentamiento global es natural, entonces ¿cómo podemos saber qué parte es artificial?
PZ: En realidad, sí que lo sabemos. El IPCC declaró con un 95% de las evidencias científicas a favor, que desde 1950 la mayor parte del calentamiento global ha sido causado por el hombre.
El calentamiento global no es perjudicial para el planeta
3. Roy Spencer: ¿Es el calentamiento malo? ¿Quién decidió que una pequeña cantidad de calentamiento es necesariamente algo malo?
PZ: Si seguimos en la misma línea, alcanzaremos un crecimiento de 5ºC de calentamiento global para el año 2100. Estos 5ºC son la diferencia entre las temperaturas medias actuales y las de la última edad de hielo.
Por lo tanto, no se trata de un incremento mínimo. Además, con respecto a si el calentamiento es bueno o malo; existen un gran número de estudios científicos que demuestran el impacto que tendrá la subida de las temperaturas para el planeta y la supervivencia de la humanidad.
El CO2 existe de forma natural en nuestra atmósfera
5. Roy Spencer: ¿Es malo el CO2? ¿Cómo es que el dióxido de carbono, necesario para la vida en la Tierra, ha sido renombrado como un gas peligroso?
PZ: El dióxido de carbono en sí no es “malo”. El agua también es necesaria para la vida y no sería bueno ver el planeta anegado de agua como .
Está científicamente demostrado que los Gases de Efecto Invernadero (GEI), el dióxido de carbono entre ellos, absorben y emiten radiación dentro del rango infrarrojo. Por lo tanto, demasiado dióxido de carbono en la atmósfera genera un excesivo calentamiento global de la Tierra.
Los miembros del IPCC responden a intereses políticos
5. Roy Spencer: Política y creencias del IPCC. ¿Por qué se necesita un cuerpo político (el IPCC) para decirnos lo que los científicos “creen”? ¿Y cuándo las “creencias” de los científicos se traducen en pruebas? Y cuándo ha sido determinada la verdad científica por un voto… ¿Especialmente cuando los que pueden votar son del “Partido de los Creyentes del Calentamiento Global”?
PZ: La mayoría de negacionistas aseguran que los científicos que participan en el IPCC están pagados por los gobiernos y que por lo tanto responden a intereses más allá de la veracidad de la información y de las predicciones que manejan.
Lo cierto es que únicamente un 3,5% de los miembros del IPCC están en plantilla -unos 30 científicos-. El resto, son más de 800 científicos voluntarios. Estos profesionales no promueven sus creencias, si no que se encargan de sintetizar y actualizar los datos y el estado de las investigaciones en sus respectivos campos de trabajo.
Los modelos de predicción del cambio climático no son lo suficientemente precisos
6. Roy Spencer: Los modelos de predicción del cambio climático no están basados en la física. ¿Debemos creer en pronósticos llevados a cabo por dudosos modelos? ¿Por qué deberíamos creer en predicciones modelo del futuro, cuando ni siquiera pueden explicar el pasado?
PZ: Cualquier herramienta de evaluación y predicción comporta cierto grado de incertidumbre en su futuro pronóstico. Aun así, en el último siglo se han ido mejorando estos mecanismos incluyendo los datos confirmados y se han comparado con fenómenos climatológicos del pasado.
Aunque no sean capaces de contemplar fenómenos imprevistos como erupciones volcánicas, por el momento, son los modelos que más nos pueden ayudar a predecir cómo afectará nuestra actividad al calentamiento global de la Tierra, y así poder detener la emergencia climática.
Aunque existan múltiples hipótesis que tratan de desmentir el cambio climático, lo cierto es que cada vez pierden más fuerza ante las evidencias del cambio climático. Tras la crisis sanitara de la COVID-19, los gobiernos deben retomar sus Planes de Energía y Clima y empezar a ejecutar una salida verde de la crisis. Lograr una sociedad ZEO es la única forma de revertir el cambio climático y evitar sus consecuencias.
Graduada en Periodismo por la UAB con mención en Sociedad y Cultura. Anteriormente publicando para La Vanguardia en ámbitos de RSC, Empresas, Alimentación y Salud. Máster de Comunicación&Marketing Digital en INESDI y Responsable de Comunicación de PlataformaZEO.