¿Cómo pasarte al coche eléctrico?

Los alarmantes datos sobre vehículos y emisiones copan cada día páginas de periódicos. Muchas grandes ciudades están empezando a restringir el tráfico de vehículos altamente contaminantes. Incluso algunos muy antiguos ya no pueden salir a la calle. Y es que las emisiones provocadas por el transporte suponen un 80% de los gases de efecto invernadero que contribuyen al cambio climático.

Es el momento de ser más ZEO y participar en la reducción de estas emisiones. Una de las formas para hacerlo es pasarse al coche eléctrico pero, ¿cuáles son los pasos a seguir para conseguir una correcta transición?

1. Investiga el factor económico

La decisión de pasarse al coche eléctrico puede parecer en un principio una medida que sale cara. Se estima que los vehículos eléctricos cuestan entre 5.000 y 13.000 euros más que los convencionales. Aún así, si tenemos en cuenta que se eliminará por completo el gasto en combustible resulta fácil amortizar el gasto.

Pasándose al coche eléctrico es posible ahorrar una media de 1.000€ en gasolina

Con un coche eléctrico recorrer unos 100 kilómetros cuesta aproximadamente 1,30€ mientras que recorrerlo con un coche de gasolina rondaría sobre los 6,5€ – casi 5 veces más que el coche eléctrico-. A la larga este cambio hacia una movilidad más ZEO es a la vez rentable para el conductor. Según varios portales de motor online pasándonos al eléctrico es posible ahorrar hasta una media de 1.000€ anuales de gasolina.

En España aún no existen cambios significativos en la circulación o la movilidad para conseguir el éxito de los coches eléctricos. Otros países como Noruega y Holanda fomentan mediante cambios específicos la transición al coche eléctrico. Medidas tales como no pagar peajes en la autopista o aparcar gratis en la ciudad, además de pagar menos impuestos de circulación, son algunos de los beneficios que ofrecen estos países. De momento el estado español impone el mismo IVA (21%) de compra para los coches eléctricos que para los de combustión, mientras que en el caso del impuesto de matriculación si que es del 0%.

En España los coches eléctricos solo suponen un 0.6% de las matriculaciones

Los últimos datos del 2017 alertan que la matriculación de coches eléctricos solo supone un 0,6% del total de matriculaciones. Y es que en materia de ayudas estatales específicas para la compra de coches eléctricos, en España siempre han sido insuficientes -se agotaban en unas horas-, y no continuadas en el tiempo. Ayudas como el Plan MOVALT o el plan VEA, que iba a recibir una partida de 50 millones para ayudas a coches de gas, híbridos y eléctricos -y que aún no se ha puesto en marcha-, resultan insignificantes en comparación a las que se otorgan en otros países europeos.

Desde 2011, cuando se empezaron a impulsar ayudas de este tipo, las cantidades otorgadas a particulares por la compra del coche eléctrico han sido   de 6.500€ a 5.000€. Siempre y cuando el vehículo no supere los 30.000€, en algunos períodos de tiempo ha sido posible recibir estas ayudas estatales que intentan fomentar la transición al coche eléctrico.

2. Mecanismos alternativos: convertir tu coche antiguo en eléctrico

Existe otra opción para pasarse al coche eléctrico aunque aún se encuentra en una fase experimental. Hoy en día ya es posible reconvertir un coche tradicional a uno eléctrico pagando solo una parte de lo que costaría comprarse un coche eléctrico totalmente nuevo.

Lo necesario para conseguir dar este paso es conseguir un “kit de conversión”: es necesario contar con un motor eléctrico, un controlador y un cargador de baterías. En algunos lugares como EEUU es bastante normal encontrarse con antiguos coches de gasolina reconvertidos en coches eléctricos limpios, sobretodo porque a nivel estatal no existen tantas trabas. Para que estos coches puedan circular en España, el gobierno demanda que pasen un sistema de homologación que supera los 25.000€.

La pionera empresa española Ecoche transforma coches antiguos en coches eléctricos

En España existe la empresa Ecoche que transforma coches de combustión en coches eléctricos. Además, esta empresa permite repartir este elevado coste de homologación en varias fracciones para que la suma de dinero no se desembolse de golpe.

Tal y como explica la empresa española en su blog, es posible convertir cualquier coche con motor de combustión en un coche eléctrico. Aún así, los costes de montaje y de fabricación – cada vehículo debe tener unas piezas específicamente diseñadas para conectar la caja de cambios y la parte eléctrica-, son quizá demasiado elevados. Es necesario una optimización de este proceso para que en unos años se abarate el coste.

3. Ten en cuenta la red de recarga de tu zona

En España hay aproximadamente 5.000 puntos de carga para vehículos eléctricos. Parece un número elevado, pero si lo comparamos con Holanda dónde el número de puntos de carga asciende a 32.700, el sistema de recarga español resulta ridículo.

Para “cargar” un vehículo eléctrico solamente es necesario un punto de recarga habilitado. En el caso de tener un garaje propio es fácil contar con un simple enchufe para cargar el vehículo. Es posible utilizar un único contrato de suministro: el que tengas en tu vivienda.

Solo en algunos casos, será necesario cambiar la potencia de la luz contratada

En algunos casos puede ser necesario aumentar la potencia de kW contratados. Si es de más de 10 kW, al final se pagarán hasta 53€ más en la factura de la luz. Aún así, como normalmente el coche se recarga durante la noche, cuando el consumo eléctrico de la vivienda es más bajo no es necesario aumentar la potencia.

Tal y como se ha hablado antes de las ayudas estatales, en concreto con el plan MOVALT, el concesionario en el que se ha comprado el coche eléctrico debe aportar hasta 1.200€ para la instalación de un punto de recarga homologado.

La tarifa estándar de recarga en puntos públicos oscila entre los 1,90€ y los 0.99€ per cada 100 kilómetros

Si se debe cargar el coche en algún punto habilitado en la ciudad, unos 100 kilómetros costarán aproximadamente 1,90€. Aunque si se carga el vehículo durante la noche la tarifa es más baja y el coste puede descender a los 0,99€. En España el precio es de 15 céntimos por cada kWh. Es necesaria una actitud más ZEO por parte de los ayuntamientos a la hora de establecer las tarifas de recarga pública porque por el momento cargar el coche eléctrico en la vivienda resulta mucho más barato.

4. Vigila la autonomia a la hora de comprar

En la actualidad grandes magnates de la tecnología eléctrica como Tesla trabajan para mejorar la autonomía de los coches eléctricos, un factor que puede echar atrás una compra si lo que queremos es un coche que haga largas distancias. Tanto es así, que incluso un grupo de investigadores coreanos de Ulsan han desarrollado una batería que tiene una autonomía de hasta 700 kilómetros .

La media de autonomía de los nuevos coches eléctricos es de 400 kilómetros

Los estándares actuales se sitúan en una media de 300 a 400 kilómetros de autonomía. Se trata de un gran avance si se hace una comparativa con los primeros coches eléctricos que apenas disponían de 100 kilómetros de autonomía.

Al adquirir un coche eléctrico siempre se deben tener en cuenta las baterías. En la actualidad lo más habitual es comprar el coche con las baterías incluidas, es decir, son de propiedad. Aún así hoy en día hay muchas marcas que ofrecen el coche con las baterías de alquiler – con lo que evidentemente se debe pagar una cuota mensual que dependerá de la marca-.

El factor positivo de alquilar la batería en vez de comprarla es que si se avería, se deteriora o pierde velocidad de carga, al tratarse de una batería de alquiler, la marca la puede reemplazar por otra más eficiente. En caso de tratarse de una batería de propiedad, es el propietario quien correrá con los gastos de su reparación. La diferencia de precio entre un coche completo a un coche sin batería – con lo que posteriormente deberán ser alquiladas-, puede ascender a 7.000€.