La ONU reconoce el trabajo realizado por la Oficina Catalana del Cambio Climático

En los últimos años, la comunidad científica ha trabajado en la creación de herramientas y dispositivos que nos permitan, a través del big data, aprender más sobre las consecuencias de la crisis climática y cómo hacerle frente.

La ONU ha incluido el Indicador Global de Adaptación al Cambio Climático (IGA) de Cataluña en su base de datos de trabajos científicos. Se trata del único proyecto impulsado por una administración pública que cuantifica si un territorio se está adaptando bien al cambio climático.

Se trata del único proyecto impulsado por una administración pública que cuantifica el grado de adaptación de un territorio

Con esta acción, la ONU reconoce el trabajo realizado por la Oficina Catalana de Cambio Climático, que publicó por primera el IGA en 2014. Aun así, no fue hasta el 2019 -cuando el indicador fue revisado por expertos-, que contó con la suficiente validez para captar la atención de la ONU.

Los expertos pudieron observar el progreso positivo de Cataluña en la adaptación de los efectos del cambio climático en los últimos años y se incluyeron en el IGA 42 indicadores sectoriales, 13 más que en el trabajo de 2014.

El índice de adaptación al cambio climático de Cataluña ha crecido un 8%

El Índice Global de Adaptación al Cambio Climático (IGA) en Cataluña creció un 8,74% durante el periodo comprendido entre 2005 y 2014, cuando se empezaron a aplicar las medidas y acciones de adaptación al cambio climático en esta Comunidad Autónoma.

Este indicador ha demostrado que la denominada Estrategia catalana de adaptación al cambio climático (ESCACC) recogida en el horizonte 2013-2020 está consiguiendo óptimos resultados y que Cataluña, está un paso más cerca de ser ZEO.

Cataluña señala cinco grandes hitos que le han permitido mejorar su adaptación al cambio climático

Además de este paquete de acciones y medidas, en la última década el Govern catalán ha conseguido sacar adelante cinco grandes proyectos o ideas que le han permitido ampliar su conocimiento sobre la adaptación en Cataluña:

1. La publicación del Tercer Informe sobre el cambio climático en Cataluña
2. El documento de seguimiento y evaluación de la Estrategia Catalana de Adaptación al Camibo Climático (Escacc, Horizonte 2013-2020)
3. La Ley de Cambio Climático
4. La finalización del proyecto Life Medacc, adaptando el Mediterráneo al Cambio Climático
5. La primera Cumbre Catalana de Acción Climática, que busca ampliar los compromisos de diversos sectores para impulsar acciones de lucha, adaptación y mitigación frente al cambio climático.

Todos estos factores han aportado evidencias de que las consecuencias del cambio climático ya son una realidad y que las políticas públicas y normativas sectoriales son una óptima opción para paliar sus efectos.

Los instrumentos de gestión y adaptación de carácter municipal y supramunicipal desarrollados en las áreas metropolitanas y las diputaciones también han permitido la revisión de este indicador a nivel global, y el posterior reconocimiento por parte de la ONU.

Las emisiones de CO2 en Cataluña

Según los últimos datos publicados por la Oficina Catalana del Cambio Climático, en 2017 Cataluña emitió a la atmósfera 45,07 millones de toneladas de CO2, un 2% más que en el 2016.

Durante cuatro años consecutivos, esta CCAA acumuló un incremento de emisiones GEI que los expertos vinculan a su elevada actividad industrial y al transporte, responsables del 31 y el 28% de las emisiones totales de Cataluña.

Los datos de emisión en Cataluña equivalen a la emisión de 6 toneladas por persona y año, una cifra menor que en España, que se sitúa en 7 toneladas per cápita, y Europa, que es de 8,4.

Cataluña genera el 12% de las emisiones GEI producidas por España